Vamos a resolver el juego que os proponíamos en nuestra última publicación sobre el próximo libro: La Sintaxis de la Literatura.
- Busqué trotaconventos y de entre las más ladinas escogí la mejor.
Libro de Buen Amor – Arcipreste de Hita
- El jubón de brocado que ayer vestí, Sempronio, vístelo tú.
La Celestina – Fernando de Rojas
- Entraba yo entre las piernas del triste ciego a calentarme en la pobrecilla lumbre que teníamos. El lazarillo de Tormes – Anónimo
- Se cansó el cura de ver más libros y quiso que todos los demás se quemasen. Don Quijote de la Mancha – Miguel de Cervantes
- No quiere, abrasada en celos, que me case con Marcela; y al ver que no la quiero, vuelve a quitarme el juicio.
El perro del hortelano – Lope de Vega
- Sueña el rey que es rey, y vive con este engaño mandando.
La vida es sueño – Calderón de la Barca
- Tu presencia me enajena, tus palabras me alucinan, y tus ojos me fascinan, y tu aliento me envenena. Don Juan Tenorio – José Zorrilla
- La familia de los Ozores era una de las más antiguas de Vetusta.
La Regenta – Leopoldo Alas «Clarín»
- ¿Tendrá usted la bondad de decirme si falta mucho para la casa del señor marqués de Ulloa?
Los pazos de Ulloa – Emilia Pardo Bazán
- Emprendió un viaje a Salamanca, donde hace más de veinte años vivo, para visitarme.
Niebla – Unamuno
- A mí me divierte mirarme en los espejos de la calle del Gato.
Luces de bohemia – Valle Inclán
- En ocho años que dure el luto no ha de entrar en esta casa el viento de la calle.
La casa de Bernarda Alba – Lorca
- De la casa de la calle de Aribau no me llevaba nada.
Nada – Carmen Laforet
- Mochuelo, ¿es posible que si cae una estrella de ésas no llegue nunca al fondo?
El camino – Miguel Delibes
- Cuando entran en el bar los guardias del garaje, Celestino Ortiz esconde el libro debajo del mostrador.
La colmena – Cela
- Es el caballo de Miguel Páramo, que galopa por el camino de la Media Luna.
Pedro Páramo – Juan Rulfo
- Elvira las escuchaba sin entrar en la conversación, con los ojos vagando por la repisa de su cuarto. Entre visillos – Carmen Martín Gaite
- Tú no eliges la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto.
Rayuela – Cortázar
- El coronel Aureliano Buendía recordaría aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.
Cien años de soledad – García Márquez
- Mi abuela decía que todos nacemos con una caja de fósforos adentro pero que no podemos encenderlos solos.
Como agua para chocolate – Laura Esquivel
¿Cuántos habéis acertado?